Comunicarnos es un hecho que ha mutado con el tiempo. De la oralidad presencial pasamos a un lenguaje digital a través de dispositivos móviles, lo que nos permite interactuar a distancia, acceder a contenidos informativos y lecturas distantes al papel, pero ¿es leer también una forma de escuchar?
Expertos en cultura digital abrieron el debate tanto en la presentación del Anuario AC/E de Cultura Digital como en la presentación de la publicación ¿Cómo leemos en la sociedad actual?
Para Elisa Yuste, experta en lectura en pantallas: “La palabra oral es el primer contacto que tenemos con la lectura. Tendremos una sociedad lectora que leerá en todo tipo de tecnologías y dentro de poco lo más fácil no será el vídeo, sino el ‘Ok Google’”. Yuste, sostiene: “todo es lectura, desde mirar la hora en el móvil hasta cocinar escuchando un podcast de recetas. El futuro está en las smartvoices (voces inteligentes)“.
La fuerza de la oralidad
Los audiolibros son un subgénero de los libros que poco ha poco han ido ganando terreno a la hora de acercarnos a las historias, ya sean recreativas o formativas. Esta modalidad de lectura tiene muchas ventajas. “Una de ellas es que la oralidad puede ser una actividad colectiva y participativa, mientras la lectura es una experiencia solitaria y en silencio”, explica Emma Rodero, experta en comunicación y narración oral, en uno de los capítulos del Anuario 2018.
Además refuerza que “cuando uno escucha un audiolibro siente que no está solo, que está inmerso en la historia porque el narrador se dirige a él con todos los matices de su voz. Pero, además, se pueden organizar escuchas colectivas que ayudan a mejorar la comprensión lectora, a desarrollar el lenguaje oral y a reducir el sentimiento de soledad”, añade.
Para ella “escuchar también es leer porque en ambos casos se activan los mismos mecanismos de comprensión en el cerebro”. Sin embargo, para Antonio Rodríguez de las Heras, experto en aprendizaje digital y Director del Instituto de Cultura y Tecnología de la Universidad Carlos III de Madrid, son cosas distintas. Es cierto que “la lectura va a ser una cosa de tres: autor, lector y lectobot”, pero considera que supondrá “un desafío inmenso”, ya que “el sonido tiene una bajísima capacidad para captar nuestra atención”.
La apuesta por el podcast
El auge de la oralidad se debe, sin duda, también al éxito de los podcasts, que en los últimos años han crecido en popularidad a través de plataformas como iTunes o iVoox, incluso Spotify, la conocida plataforma de la música en streaming, ha decidido incluirlos. Nosotros como Fundación no queremos quedarnos atrás, por eso te invitamos a escuchar nuestros podcast.
Y tú, ¿crees que es lo mismo leer que escuchar?
Te invitamos a conocer más detalles en la nota de Espacio FT España